Se podría decir que el voluntariado dentro del movimiento asociativo SALUD MENTAL ESPAÑA salud mental goza de buena salud. Al menos es lo que se desprende del último Informe sobre ‘El Voluntariado en SALUD MENTAL ESPAÑA 2019’, que refleja un aumento de casi el 50% en el número de personas, casi 3.800, que han participado como voluntarias en algunas de las actividades que llevaron a cabo las más de 300 entidades de la Red asociativa durante 2019.

Con motivo del Día Internacional del Voluntariado, que se celebra cada 5 de diciembre, y con el fin de seguir creciendo, la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA lanza la campaña #Apoyolasaludmental que pretende impulsar la participación en las actividades de voluntariado de las entidades del movimiento asociativo, especialmente entre los chicos jóvenes y personas con experiencia propia en salud mental.

El informe ‘El Voluntariado en SALUD MENTAL ESPAÑA 2019’ desvela, un año más, una feminización del voluntariado, con un 66% de mujeres voluntarias, frente al 34% de hombres. Marta García, técnica del Área de Proyectos y Estudios, encargada de la elaboración de este informe, explica que “el perfil mayoritario responde a mujeres de 18 a 29 años con estudios universitarios. Por eso, y con el ánimo de que el rol de cuidados pueda empezar a tener también cara de hombre, queremos animar a los chicos jóvenes a unirse a los grupos de voluntariado. Actualmente, el mayor número de hombres voluntarios se encuentra en el grupo de edad de personas jubiladas”.

El otro gran reto de la Confederación, que define esta campaña, es el de alentar a las personas con problemas de salud mental a tomar parte activa en las entidades, formando parte de los equipos de voluntarias y voluntarios.

El informe de voluntariado se elabora a partir de una encuesta que responden las personas voluntarias y, “el año pasado, el porcentaje de personas con experiencia propia en salud mental que han participado en el sondeo (20%) es el más elevado desde que comenzó a elaborarse este informe, en 2015”, destaca Marta García. “Este dato– continúa- es una muy buena noticia, porque refleja el progresivo empoderamiento de las personas con problemas de salud mental, que poco a poco van ocupando espacios dentro de las entidades, en este caso como voluntarias, implicándose y protagonizando los proyectos y las actividades que llevan a cabo”.

Es el caso de Andrés Colao Cueva y Paloma de Fátima Rubio Moreno, que buscan ayudar y apoyar a otras personas dentro de sus asociaciones, a partir del conocimiento que les otorga su propia experiencia en salud mental.

Andrés colabora con Afesa Salud Mental Asturias, donde además es miembro del Comité Pro Salud Mental en Primera Persona. Era transportista, pero tras un ataque de epilepsia le retiraron el carné de conducir y con ello el medio con el que se ganaba la vida. Perder el trabajo le sumió en una depresión, de la que pensaba que no podría salir hasta que, con el apoyo de su psiquiatra y su familia, llegó al movimiento asociativo SALUD MENTAL ESPAÑA. “Me he encontrado con la ‘sorpresa’, de que no era el único que estaba pasando por un problema de esa envergadura y de que existía un movimiento asociativo para darnos apoyo, sentirnos entre iguales, comprendidos, escuchados”.

Para Andrés, además, el apoyo y la visión que aporta una persona con experiencia propia siempre resulta más efectivo y útil, porque es capaz de ponerse en la piel de la otra persona, entender y anticiparse a sus necesidades y favorecer una relación de mayor confianza. En su opinión “la figura de la primera persona es importante en todos los sentidos y entidades, pero en salud mental creo que más que en otras ramas y va a tomar un gran protagonismo porque es algo recíproco, porque ayudar ayuda”.

A Paloma, voluntaria en la Federació Salut Mental Comunitat Valenciana e integrante de la Red Estatal de Mujeres SALUD MENTAL ESPAÑA, su actividad le aporta “satisfacción y conocimiento”. Llegó al voluntariado de la mano de una amiga después de desarrollar un problema de salud mental y con la idea de romper estigmas. Reconoce que “queda mucho para que la salud mental se vea como una parte importante que la sociedad debe tratar de conocer y aceptar”.

Así, la campaña #Apoyolasaludmental, que ha contado con la colaboración del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, busca animar a más personas como Andrés o Paloma a ser voluntarias en salud mental.

Mediante varias infografías, la Confederación destaca los compromisos adquiridos con su voluntariado a lo largo de los años. Apostar por una formación continua, que posibilite cada vez más responsabilidades y autonomía a las personas voluntarias, ampliar los campos de participación, involucrándolas, por ejemplo, en los programas de empleo e inserción laboral, promover la sensibilización para luchar contra el estigma y los prejuicios hacia los problemas de salud mental u ofrecer una atención más individualizada, son algunos de estos compromisos.

El voluntariado, elemento de crecimiento personal y profesional

El informe de la Confederación hace un repaso cuantitativo, pero también cualitativo, de la actividad desarrollada por el voluntariado de la Red a lo largo de 2019, a partir de las valoraciones aportadas por las personas voluntarias. Los resultados proceden de una encuesta que han contestado 272 personas voluntarias, un 48,6% más que en 2018, pertenecientes a entidades de 12 comunidades autónomas.

Según el documento, el 92% de participantes en la encuesta ha manifestado su completa implicación con el trabajo que realiza y el 85% ha valorado muy positivamente la formación recibida para poder desarrollar el voluntariado. Un 74% recomendaría a otras participar como voluntarias en alguna entidad, y un 24% asegura haberlo hecho ya. Ninguna persona admitió que no lo recomendaría.

También es destacable el “atractivo” que tienen las entidades de SALUD MENTAL ESPAÑA como lugares para crecer profesionalmente. Así lo demuestra el hecho de que un 30% de las personas voluntarias fuesen estudiantes o profesionales del ámbito sociosanitario, a lo que se suma un 15% de personas que han hecho prácticas en alguna de las asociaciones.

Con respecto al tipo de actividades realizadas por las personas voluntarias, el 62% de las personas voluntarias participa en eventos y actos públicos y el 58% lo hace como apoyo a personas monitoras. Las organizaciones de talleres o actividades, así como su planificación, también acumulan unos interesantes porcentajes de participación, con un 43% y 38% respectivamente.

Para concluir, Nel González Zapico, presidente de la Confederación SALUD MENTAL ESPAÑA, celebra la buena marcha y el aumento de la cantidad y, sobre todo de la calidad del voluntariado en salud mental “que cada vez más valora la importancia de inculcar una conciencia global de que la salud mental es algo común a todas las personas, a lo que todas deberíamos atender y cuidar, desterrando de una vez por todas, estereotipos y prejuicios generalizados”.