Crónica Hechizofrenia 2018. Por Ana Doblado.

Tras haberse cancelado por lluvia a finales de mayo, al fin el jueves 21 de junio se pudo celebrar en Sevilla este esperado evento. Más que un simple show de variedades, lo que se buscaba hacer era mostrar y demostrar lo que las personas con capacidades diferentes pueden llegar a hacer.

Organizado por la Fundación  pública para la integración social de la personas con enfermedad mental (FAISEM) y presidiendo la Consejera  de  Salud, Marina Álvarez, que recalcó a lo largo de la gala la necesidad de este tipo de eventos para la erradicación del estigma y los estereotipos en torno a las patologías de Salud Mental así como la necesidad de la normalización en las relaciones entre la sociedad, los pacientes, los familiares y los profesionales.

Con una puesta en escena muy cuidada, en esta ocasión la meteorología favorable sí acompañó creando un ambiente agradable y con cierta magia tanto por la frondosidad de los árboles que rodeaban el recinto al aire libre como por la iluminación con juegos cromáticos del exterior del casino y que resaltaba estratégicamente los elementos arquitectónicos característicos de tan emblemático edificio.

Sobre las 8, el grupo de batucada Kun Kun Kai abrió la gala con su espectáculo de ritmos pegadizos “Psicopercusión Kun Kun Cai”. Acto seguido, los maestros de ceremonia fueron presentando las actuaciones de una manera entretenida donde no faltó el buen humor, la buena música y el reconocimiento a artistas de la talla de José Mateos o la encomiable labor de voluntariado cultural que desde el Grupo de Recreación Histórica de la colección Museografica de Gilena “Legio I Vernacula” llevan a cabo.

Desde la danza clásica del grupo “Teresa Guerrero” a las sevillanas del Coro de ASAENES pasando por la interpretación de “¨La vie en rose” de la excepcional voz de Susana Rodríguez y el piano de David Maroto Centeno o a exquisitez de la  coral clásica “Voces Solidarias”, el tiempo pasó volando y prácticamente las dos horas que duraba supieron a poco.

Organización cuidada, un excelente equipo de profesionales a cargo del apartado audiovisual y sobre todo, una gran cantidad de asistentes no ya solamente familiares, enfermos y autoridades sino también muchas personas que recogieron sus invitaciones para poder disfrutar de una gala de un nivel que lejos de ser pretenciosa, dispuso de los mejores mimbres para ser recordada por los que tuvimos la suerte de asistir.

La noche, solsticio de verano y día de la Música, no podía ser más especial para la celebración de un acto que cumplió lo que prometía, todos salimos hechizados y bajo el embrujo de una ambientación mágica.